

Hace casi tres años lo conocí, cuando lo ví por primera vez no me llamó mucho la atención, parecia que temía por sus huesos, pero en el transcurso de la noche me acerqué, conversamos y me gustó, aunque parece que a él le interesaba más conversar con mi hermana que conmigo, una vez, después, cuando ya éramos pareja, él dijo que mi hermanita Cata y él tenian una conección especial, erán una especie de amigos incondicionales, no sé, siempre han estado juntos cuando se necesitan, él confió siempre más en ella que en mi, cuando decidió uno de sus escapes (porque sé que hace poco lo intentó) fué a ella a la que le contó, cuándo le gustó una mina y se metío con la misma, ella denuevo fué la primera en saberlo.
Hace ya casi 8 meses que lo nuestro terminó y hoy amanecí extrañandolo, le escribí a su correo y también comenté su última publicación en su blog, porque quería recordar esos momentos en que sentí que fuimos felices, cuando éramos uno, cuando éramos complices, ahora él está enamorado y creo que feliz, lleno de planes en los cuales yo no estoy incluido y eso me hace sentir melancolía de lo que pudo ser y no fué, de lo que pude ser y no soy y sobretodo de las espinas clavadas en el alma que sé que a él todavía le duelen.
A veces es lindo recordar momentos lindos....